COMO SALVAR EL MATRIMONIO

10 de febrero de 2024

“Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno. Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.”

Mateo 5:29 -30

Los abogados especializados en divorcios conocen las estadísticas de divorcios relacionados a la pornografía y los problemas que esto causa. Esto es el peligro de la pornografía: lo que parece ser inofensivo y a menudo un acto secreto puede guiar a severas repercusiones en nuestras relaciones, especialmente con su esposa. Es difícil nombrar el número de matrimonios jóvenes en la iglesia que tienen problemas para desarrollar una vida sexual normal debido al uso de la pornografía del esposo. ¿Por qué? Porque no hay mujer en la faz de la tierra, sin importar lo bella que sea, que pueda competir con las fantasías sexuales que el porno provee. Este es el poder demoniaco de la pornografía.

John Mayer, un popular músico que está siempre rodeado de atractivas actrices, confesó recientemente que se siente más atraído por la pornografía que por relaciones en la vida real. Es una adicción muy poderosa, tanto así que Jesús la tuvo por algo muy serio. Así que, Jesús da una representación bastante grafica de ello en Mateo 5 para establecer su argumento. Ahora bien, Jesús no estaba implicando que alguno se corte las manos y se arranque los ojos de forma literal si incurrimos en pornografía. El simplemente estaba comunicando la seriedad del pecado de la lujuria, el cual, si pasa sin ser tratado a través de un tipo de cirugía completa, puede consumir nuestras vidas.

¿Está sufriendo tu matrimonio por tu uso de la pornografía? Ser libre de la pornografía es posible y comienza simplemente acercándote a Dios y confesando tu lucha con este pecado. Afortunadamente, podemos consolarnos en el hecho de que Cristo ya llevo toda nuestra culpa y vergüenza a la cruz y nos ofrece completo perdón si nos arrepentimos y volvemos de nuestros pecados. Esta promesa incluye a la lujuria, la pornografía y hasta el daño en relaciones que esto causa. ¿A qué estás esperando? No lo ignores o escondas mas, reconoce el problema. Confiésalo a Dios y pide que el poder Salvador de Cristo transforme tu corazón y tu matrimonio.