JESÚS: UNA HISTORIA PARA TODOS

10 de junio de 2020

«Por lo cual, siendo libre de todos, me he hecho siervo de todos para ganar a mayor número… a todos me he hecho de todo, para que de todos modos salve a algunos.» 1 Corintios 9: 19 y 22b

No es de extrañar que las conversaciones acerca de la fe sean diferentes dependiendo tanto del contexto como de la audiencia. Piénsalo.  La manera en que un cristiano discute de la fe con un pianista chino y con un obrero del norte del estado de Nueva York será diferente. ¿Qué diferencias habría al compartir con un imán musulmán y un playboy de Hollywood? ¿Imagina una discusión de fe con un chico de secundaria contra una feminista de la Ivy League? Piensa en las grandes diferencias en las luchas, preocupaciones y visiones del mundo. Cada conversación se ve y suena diferente. Por esta razón, los cristianos están llamados a tomar diferentes enfoques para compartir el Evangelio de Jesucristo con personas diferentes.

El apóstol Pablo habla acerca de este concepto en 1 Corintios.  Pablo explicó su disposición a dejar de lado sus propias preferencias y prioridades personales para mostrar interés en otra persona. ¿Por qué? Para poder mostrarles a Cristo de una manera que ellos entiendan y que sea significativa para ellos. Lo principal en altruismo es entender en qué punto se encuentra la persona, y tratarle con genuino cuidado y respeto, en la esperanza de poder ayudarles a conocer a Jesús.

¿Qué hay de ti? ¿Estás dispuesto a entender a la gente en su situación para compartir la verdad del Evangelio? Debemos hacerlo, porque Jesús hace lo mismo por cada uno de nosotros. Él nos encuentra en nuestro pecado, en nuestra vergüenza y en nuestro quebrantamiento y nos ofrece una vida nueva por medio de él. ¿Recuerdas quién fue el primero en compartir la historia de Jesús contigo?  ¿Entonces por qué no lo estás compartiendo con otros?  ¡Es el mejor regalo que puedes darles!