Redes sociales

4 de junio de 2019

“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén». – Mateo 28:19-20 

Cuando Jesús mandó a sus discípulos a hacer discípulos a todas las naciones, no era una tarea fácil. Ellos tuvieron que caminar a todas partes adonde iban durante días y semanas para llegar a sus destinos. Ellos tenían la habilidad de escribir cartas, pero como la entrega era a mano, otra vez, el tiempo y la distancia, hacían que este fuera un proceso lento, y el boca a boca era principalmente la única manera que alguien tenía de oir lo que sucedía fuera de su área, lo cual no contribuía a esparcir fácilmente la Palabra. Entonces, la carta circular y el sistema de caminos de Roma eran la última tecnología.

En cambio hoy, la tecnología de alta velocidad, hace posible enviar información en un parpadeo a cualquier parte del planeta. Estos servicios de entrega rápida están disponibles en computadores del hogar y la oficina, cafés Internet, teléfonos y PDA’s, para sólo nombrar algunos. Básicamente no nos queda ninguna excusa para no compartir activamente a la gente sobre Jesús… alrededor de todo el mundo.

Uno de los fenómenos de Internet de más rápido crecimiento en el mundo de hoy es el auge de las Redes Sociales. Ahora, si ustedes me conocen a mí, no es una sorpresa escuchar que yo no soy un gurú de la tecnología, pero, aún yo, he oído acerca de redes como Facebook, MySpace y Twitter; no son perfectas, pero son grandes conductos para esparcir información, así como también su fe.

Dios nos ha dado la tecnología de hoy como una herramienta. Si los apóstoles hubieran tenido la tecnología de hoy, ellos seguramente habrían usado el correo electrónico, los mensajes de texto, mensajes instantáneos y sitios Web para hablar de Jesús. ¿Qué haría usted? ¿Ha considerado maneras en que puede usar la tecnología para compartir su fe con amigos y conocidos en línea?

Seguramente usted se pregunta, ¿dónde empiezo? Aquí hay una idea: Si tiene una cuenta de Facebook, nos encantaría que se uniera al grupo “Desde el corazón” www.facebook.com/devocionasdiarias y compartiera estos devocionales diarios con su red de amigos; quién sabe, puede que sus amigos compartan con sus amigos, y sus amigos compartan con otros amigos. Compartir de Cristo nunca ha sido tan fácil como lo es hoy. Pero no espere… ¡hágalo ya!